La formación online es recomendable en muchas ocasiones. Supone una ayuda para cualquier estudiante en prácticamente todas las etapas de su vida, ya sea estudiando, buscando trabajo o ya como profesional en activo.
Sin embargo, también es cierto que hay ocasiones en las que si bien no diríamos que es no recomendable, al menos hay que considerar que sí sería más difícil afrontar un curso de este tipo.
Cuando estás en periodo de exámenes
Si, por ejemplo, estás estudiando un post-graduado o en la misma Universidad, incluso si estás en un curso de Formación Profesional de Grado medio o Superior, es posible que te plantees compaginar estos estudios con un curso de formación online.
Lo cierto es que es una gran día porque permite complementar muy bien el conocimiento que vas adquiriendo durante el curso principal, aprender nuevos conceptos relacionados o incluso desarrollar tu formación sobre dos ramas diferentes dentro de un mismo sector profesional.
Sin embargo, ten en cuenta que si ya es difícil compaginar dos cursos formativos, en época de exámenes lo va a ser mucho más. Si te encuentras en esta situación, la mejor recomendación es centrarte en las pruebas académicas actuales y, más tarde, afrontar con ilusión, tiempo y esfuerzo el siguiente paso formativo.
Cuando comienzas un trabajo nuevo
La formación online está siendo muy aprovechada por profesionales en activo. Les permite mejorar en competitividad, ampliar sus conocimientos actuales e incluso encontrar nuevas líneas de negocio que proponer en la empresa.
Pero si bien en cualquier momento de tu trabajo puede ser más o menos asumible, justo cuando empiezas supone un doble reto.
Por un lado, porque te estás acostumbrando a un nuevo trabajo, en el que debes aprender rutinas laborales, quizás nuevas tareas que no estudiaste y requerirá de toda tu concentración.
Pero también por la imagen que transmites. Una empresa que identifica la formación de alguna especialidad por parte de un profesional que acaba de entrar, solo puede pensar que sus expectativas están fuera de la compañía. Si te decides a ello, habla con tus jefes y explica las ventajas que esta formación puede ofrecerles.
Cuando tienes un proyecto formativo en marcha
Oposiciones, una especialidad, incluso un curso de formación aparte ajeno a tu sector profesional corriente. No importa por qué abordas un nuevo proyecto formativo. Lo importante es que lo hagas con plena concentración.
Es una decisión importante y dividir tus fuerzas de concentración, tiempo y recursos no va ayudarte a lograrlo con todo el esfuerzo que pensabas originalmente.