Un curso de formación online puede tener profesores, guías, campus digital, foros con otros estudiantes… pero al final es el propio estudiante el que debe dirigir casi toda la metodología de aprendizaje del curso.
En la mayoría de ocasiones esto transcurre positivamente y sin incidentes. Sin embargo un pequeño porcentaje de estudiantes no consigue terminar de forma correcta el curso o encuentra demasiados problemas durante su desarrollo.
Identificar los signos apropiados nos ayudará a solucionar los obstáculos y poder realizar el curso de formación online hasta terminarlo sin inconvenientes. Estos son algunos de los signos más notorios que podríamos identificar.
Falta de comprensión de nuevos temas
La mayoría de los cursos son acumulativos. Esto supone que si encontramos dificultad en la comprensión de algún tema, el origen del problema puede estar anteriormente.
Retrocede sobre tus pasos e intenta encontrar la información que te pueda servir de base para seguir aprendiendo el resto del temario con fluidez. Pero nunca intentes avanzar sin entender un tema, porque la complejidad podría ir en aumento hasta llegar a ser demasiado difícil mantener el ritmo propuesto por el curso.
Reducción de horas de estudio
En primer lugar hay que dejar claro que la organización es uno de los requisitos imprescindibles para poder afrontar un curso de formación online de forma correcta. Esto implica dedicar ciertas horas del día a un estudio del curso de forma inamovible. Incluso en el supuesto de que no hubiera nada nuevo que estudiar, el repaso y la mejora con conocimiento complementario debe ser una prioridad.
En todo caso, mientras el curso avanza, se queda evidente que estas horas al día son insuficientes. Por tanto, conforme se acerca la recta final del curso de formación online, la necesidad de más tiempo de estudio debe estar presente. De no ser así, se estará descuidando la dedicación que es tan necesaria.
Menos interacción con el entorno digital
Al principio un curso de formación online crea expectación en cualquier estudiante. Esto le motiva a visitar el campus digital, los foros donde conocer gente e intercambiar impresiones, así como los diferentes entornos online que el centro formativo ofrezca.
Pasados los primeros días, el aprovechamiento de estos recursos baja a su nivel más básico, pero va creciendo conforme el curso se desarrolla. El estado óptimo será cuando el estudiante casi dedique el mismo o incluso más tiempo a esto que al estudio, sin por ello descuidar lo más mínimo la obtención de conocimiento.
Todo el entorno digital del centro de formación online se convertirá en una pieza imprescindible del estudiante, con el que mejorará tanto su estudio como su experiencia con el curso.